Título: La novia de Sherbrooke (Sherbrooke brides #1)
Autora: Catherine Coulter
Editorial: Plaza y Janes
Páginas: 382
Género: Romance - Histórico
Douglas, conde de Sherbrooke, ha logrado sobrevivir a la guerra y, hastiado del dolor y la devastación que ésta acarrea, decide apostar por la vida y casarse para fundar una familia. Ha elegido a Melissandre Chamber, una mujer de extraordinaria belleza. Sin embargo, sus responsabilidades le impiden viajar donde ella y decide realizar un matrimonio por poder, haciéndose representar por su primo Tony. Sin embargo, éste queda prendado de Melissandre en cuanto la ve y decide casarse con ella. En cuanto a Sherbrook, cumple con su encargo, pero sin que él se entere lo casa con Alexandra, hermana de Melissandre, una mujer de carácter indómito, independiente y apasionado. Con el tiempo, Sherbrooke se entera de la maniobra urdida por su primo y decide anular el matrimonio. Sin embargo, Alexandra aún tiene mucho que decir.
Podríamos decir que estamos ante el típico romance histórico, pero os mentiría. "La novia de Sherbrooke" tiene cosas comunes con otras historias románticas, típico protagonista mandón y poderoso, pero ahí queda. Lo demás es una vuelta de tuerca del género. Podemos encontrar una gran cantidad de situaciones cómicas hasta el absurdo, y yo disfruto mucho del humor y más en una historia romántica tan dulce como esta.
Catherine Coulter hace gala de un estilo narrativo fresco, divertido y romántico. La autora ha creado una manera de contarnos la historia con la que he disfrutado mucho, no hay nada fuera de lugar en "La novia de Sherbrooke".
Estamos ante una historia que comienza con varios líos, al protagonista le casa su primo por poderes con la mujer equivocada, Alexandra, un joven con carácter, el prefería a su hermana Melissandre que es algo así como bastante lenta para entender las conversaciones, pero es excesivamente guapa y adorable. Melissandre se casa con el joven primo de nuestro protagonista, ¿Cómo imagináis de divertida una historia que empieza así?.
Douglas Sherbrooke no va a aceptar con una sonrisa a la esposa que le han impuesto, va a luchar con uñas y dientes por quitarse de encima a esa mujer tan terca que no quiere tener cerca. Alexandra por su parte, necesita un marido porque la situación económica de su familia no es que sea mala es que es horrible, por lo que lucha por que Sherbrooke esté contento con ella.
La historia camina entre - como ya os decía - partes muy divertidas, partes tiernas, pero también unas bonitas escenas en las que Alexandra lucha por encontrar su lugar en el mundo, por entender que quiere en la vida, eso sí va a costarle olvidarse de las premisas básicas de la época, como casarse por su familia y no por ser feliz.