Alguien está mintiendo
Karen M. McManus | 352 páginas | Thriller juvenil
Últimamente estoy retomando el género juvenil, es uno de mis favoritos, pero me gustan tantos que siempre termino dejando alguno de lado. En esta ocasión, me animé con un thriller juvenil y eso es algo novedoso para mí.
La acción se sitúa en un instituto de élite, 5 alumnos son castigados pero uno de ellos muere en el aula de castigo. A partir de aquí comienza la vorágine de una investigación de policía que no mira más allá de lo fácil, buscando encontrar un culpable rápidamente, además de ser una investigación que constantemente filtra información sobre los cuatro alumnos castigados que estuvieron con Simon Kelleher, alumno fallecido y odiado por todo el instituto.
Mucha gente tenía motivos para matar a Simon Kelleher, desde que fundó una web donde colgaba rumores (todos ciertos) sobre sus compañeros de instituto, estropeando vidas por el camino sin ningún remordimiento.
Los cuatro compañeros: Addy, Cooper, Nate y Bronwyn se ven de la noche a la mañana señalados tanto por la policía como por sus compañeros. El asesinato termina por unirles más de lo imaginado, encontrando apoyo los unos en los otros y creando un grupo precioso. Pero durante la lectura, no sabemos en quien confiar, ¿Alguno de los protagonistas puede ser el asesino?
Pronto los medios de comunicación entran en escena, diseccionando a cada persona e influyendo en la opinión pública, manipulando información según les interesa.
Durante la lectura, conocemos bien a cada unos de los cuatro protagonistas, los capítulos de cada personaje se van intercalando, mostrándonos que una fachada de vida idílica no siempre lo es tanto y que cada uno tiene sus propias cargas.
Es un libro muy adictivo, con un ritmo tremendo en el que el lector lo tiene difícil para saber quien ha matado a Simon ya que nos encontramos con muchas pistas contradictorias, que al final cobran sentido.
Se nos habla de las consecuencias del acoso escolar, no de manera superficial, realmente vemos lo crudo que es vivir algo así. Las expectativas de los padres, de uno mismo, el nivel de exigencia,...
Los protagonistas son el ejemplo de la aceptación de los errores o de que los demás pueden ser diferentes e igualmente valiosos.